
Oruga peluda u Oruga de los prados (Ocnogyna baetica)
La oruga peluda o de los prados es una mariposa nocturna. Cuando está en la fase de oruga, es la típica oruga naranja, negra y blanca que solemos ver en grupo bajo una telaraña que ellas mismas tejen. Es por eso que suele confundirse con la procesionaria, pero no produce los efectos nocivos de ésta, aunque sí es muy perjudicial para nuestros cultivos.
Desde principios de año se ha detectado la presencia masiva de orugas peludas en nuestras parcelas. La “Ocnogyna baetica”, es propia de la mitad sur de España y común en campos, pastos, lindes y eriales. Normalmente su aparición suele coincidir con el final del invierno, pero la atípica situación climatológica, que hemos tenido hasta ahora, ha hecho que se adelante su aparición.

La hembra, que carece de alas, difícilmente puede relacionarse a primera vista con una mariposa. Los machos son mariposas , con manchas de color negro sobre fondo blanco en las alas. Los huevos son de color ámbar pálido, esféricos y se agrupan en una bola de color gris oscuro en número de 700 a 1000. La incubación dura entre 40 y 70 días. Las larvas son negruzcas y se van recubriendo durante su desarrollo de pelos de color variable, alcanzan alrededor de 2 ó 3 centímetros de longitud.
La puesta se realiza en octubre y los huevos eclosionan a mediados de diciembre, en contra de lo que es habitual en el resto de las mariposas. Esto que parece una contradicción, supone una adaptación de la especie a las zonas herbáceas de la región mediterránea, puesto que estas orugas se alimentan de hierba que en el estío se agosta con rapidez, mientras que verdean en invierno, siempre que las temperaturas no sean demasiado rigurosas.
Las crisálidas son de color marrón, redondeadas, de 1 centímetro de longitud y se encuentran en el suelo entre los 10 y 20 centímetros de profundidad. En este estado pasan todo el verano hasta bien entrado el otoño, incluso algunas tardan otro año en emerger.
Las orugas peludas crean telarañas encima de las hierbas recubriendo a las colonias jóvenes, alimentándose de las plantas que están debajo de esa telaraña. Cuando alcanzan un mayor tamaño se desplazan fuera de ella en busca de más alimento. La oruga de los prados suele estar considerada como una plaga pudiendo afectar a diferentes cultivos ya que se alimentan de una gran diversidad de plantas. Destacar que en este año se está observando una elevada presencia de colonias de oruga peluda durante el invierno, como en años anteriores.

Por lo tanto, en esta época es recomendable inspeccionar las hierbas espontáneas cerca de las parcelas para destruir los nidos de oruga y, así disminuir la población antes de la dispersión de los integrantes de las colonias..